DÉJALO YA! LIBÉRATE

El siguiente post va dedicado a mis amigas y a mí por supuesto que hemos dejado que nos partan el cuore, con toda la autoridad que nosotros hemos dado a esos angelitos de Dios que nunca valoraron ese gesto.

Primero, debemos asumir que el corazón nosotras dejamos que lo rompieran, porque ojo, siempre supimos que al entregar nuestro amor a ese hombre genial que queríamos tanto íbamos a salir trasquiladas, porque en el fondo de nuestro ser, sabíamos que él jamás estaría a nuestra altura, pero nos gustaba, nos gustaba tanto y como me decía un amigo "Tu disfruta todo lo que puedas, reúne todo lo positivo, después eso se va acabar y ahí llorarás, pero pasará, así que tranquila". Y claramente hacía eso, pero ya no estamos para seguir rompiéndonos el corazón. Mis queridas amigas han sufrido, por tomarle atención notable a un tipo que jamás se tomó tal importancia hacia ellas, A MENOS QUÉ, sepa que conociste un tipo demasiado genial (de verdad) más que ellos mismos (son un ego total) y que está superando tu atención, o diciéndole "Me aburriste, déjame en paz". 

Con una de esas dos cosas se les mueve el piso y sienten el terrible miedo de perder a la mujer que está siempre para ellos, cuando no tienen nada que hacer o cuando están aburridos o ninguna otra chica los tomó en cuenta, ahí estás tú. Te presente (a ti misma) eres la que nunca falla y ellos son los que nunca están cuando tus los necesitas.

Créelo. Todas hemos pasado por eso. Y a veces más de una vez.

Ahora ¿hasta cuándo aguantas? Hasta cuando te das cuenta que te aburriste, si recibiste un mensaje de él y en vez de alegrarte te dio muchísima rabia, tanta que apagaste el celular para no seguir recibiendo sus mensajes madrugadores que por favor, aquí y en la China, te está escribiendo a aquellas horas porque está ebrio, no porque justo se acordó de ti. No, un hombre que te quisiera no te mandaría mensajitos nocturnos.

¿Qué hacer?

1- Si ya te molestó. Ok, avanzamos. Evolucionamos al fin y eso es una madurada. Así que no te asustes. No es que seas la peor mujer del mundo, estás queriéndote y queriendo tu tranquilidad, sí, antes no te querías. PUNTO.

 2- Resulta que si te diste cuenta que te está usando es porque estás evolucionando como persona, estás queriendo otras cosas, estás deseando conocer a personas que te aporten y quedarte con las que realmente te hacen subir y no las que te producen un terremoto y te hacen volver al principio.

 3- Tomar la decisión. Despídete. No le respondas los mensajes. Júntate con él y dile lo que sientes. Cualquiera de esas opciones es válida. Ahora solo debes tener claro que no lo quieres volver a ver y que esa será la última vez, dile el daño que te hace verlo, que no te aporta a tu evolución espiritual y que quieres dejar de ser su adicción. Si te sale mala onda entre medio de la expresión es normal; si lloras no te preocupes. Sé clara, él se merece escucharte y sentir toda la rabia que tienes, aunque si ya tomaste esta decisión dudo que la rabia te conlleve a mirarlo a los ojos, ya es la decepción, ya es la saturación y las ganas de despegarte al fin de ese ser que no te aporta nada ¿TE APORTA ALGO ? Respondete. Al final sabes que te dirá, la siguiente será su frase “Ok. Como quieras” probablemente lo diga con un desprecio hacia ti y te haga sentir muy mal. Resiste, sólo está jugando con la probabilidad de que le digas “No, no, olvídalo, me quiero quedar contigo”. Se fuerte y no seas idiota. Si realmente te quisiera, te diría "Ok. Te comprendo. Disculpa si te hice daño", te dará un abrazo fraternal, y jamás de los jamaces volvería a tu vida a menos que el cruel y fatídico destino lo hicese.

4- Si quedaste mal, júntate con un amigo o tu amiga, llora si quieres, embriágate si quieres, así que si lo vas hacer hazlo un día en que puedas meterte todo el vino que quieras, pero no vuelvas a verle. Sal a bailar, escucha la música que te eleve, pídele a alguien que te toque la guitarra, pídele a alguien que te haga un cd con las canciones más tristes. Pídele a alguien que te lleve todos los días a pasear para sacar la cabeza del auto y sentir el frío viento.

5- Antes de embriagarte, borra sus datos de tu teléfono. Ojalá no te sepas el número de memoria y ojalá no lo tengas anotado en algún lado para ver si ha cambiado en unos meses. No. Aquellos hombres cambian, pero no lo harán contigo, aunque algunos siguen siendo los mismos, pobrecitos. No lo harán contigo, porque nunca te respetaron, nunca te valoraron y obvio, nunca te quisieron de verdad, nada comparado a como tú lo quisiste. 

6- Ahora, deja que el tiempo haga lo suyo, disfrútate, sé feliz, sé libre, sé tú misma, conoce personas, ábrete a nuevas emociones, si te buscan acéptalo, si te quieren déjate querer, no te dejes atormentar por el mal que una o dos personas te causaron en algún momento de tu vida. Olvida y probablemente ni te duela recordarle con canciones, calles, aromas, comidas, ocasiones, etcétera, solo será una molestia. Deja que eso pase, si te pones a pensar en él, pues deja de pensar, haz algo, ve una película de acción, de terror o suspenso, pero no de amor, que si no, te vas a la cresta, eso es para después, eso viene más adelante; después llorarás viendo Notebook por quinta vez, pero será un llanto por el amor y qué rayos, sí existe, y es lindo verlo reflejado en una película. Sal a caminar, haz ejercicio, caminar sirve ene para despejar la mente.

7- Siente feliz, intensa, perfecta, quiérete tanto, valórate. Comparte con los tuyos, sal de paseo, visita a tu familia, visita a tus amigos y date momentos para ti sola. Reconócete.

Yo fui una como todas hemos sido una, una víctima de un amor unilateral, donde solamente una de las partes es la que quiere, en este caso, tú.

Tu corazón se llena, se llena y se aburre, y cuando se satura se rebalsa, se cae, se vacía sin que tu lo quieras. Y se comienza a llenar con procesos internos bellos que debes dejar que aparezcan.

Si quieres un tema para ti, escucha este https://www.youtube.com/watch?v=fYsEMJsxyig debes volver, apagarte y estar un rato, dejarte llevar, elige la claridad y el amor real.

Un beso mujer. Nunca dejes que el humor se te pierda por ahí.